Una de las definiciones de equilibrio es: Situación de un cuerpo que se sostiene, sin caerse.

Lo único que hace que yo me mantenga en equilibrio es Dios.

La educación convencional va hacia el desequilibrio, Dios en los cielos  juzgador y yo pequeña y desvalida, viviendo con miedo y siendo vista desde ese cielo con dureza.

Cuando descubrí que no era así, que Dios esta en mí, conmigo, delante de mi , detrás de mí y en mi casa. La luz brilló, las tinieblas del temor se disiparon y comencé mi sociedad con  Dios.

Dios es mi aliento, mi pensamiento, mi amigo, mi motivador, mi morador interno. Mi equilibrio.

Al comenzar cada día Le agradezco y comienzo diciendo:

 “Tu voluntad, no la mía”

Entonces todo parece fluir en equilibrio y armonía, aun cuando las cosas muchas veces parecen ir mal. Recuerdo que Dios es perfecto y su obra también lo es.

Somos socios, El es el hacedor y yo el instrumento. ¡Que felicidad!

Si algo quisiera poder transmitirte, es esta sensación de estar completa, de sentirse acompañada, que no hay nada que no pueda poner es Sus manos y que Su respuesta siempre es pronta.

En una oportunidad coincidí en el ashram de mi maestro, con Thérese,  una joven  francesa de 20 años. Ella me relato que sus padres eran ateos y que ella había sido educada de la misma forma,  hasta que llego a sus manos un libro sobre las enseñanzas de Buda.

 Al leerlo, fue tal su conmoción que dejo la universidad y viajo a la India buscando iluminarse. Cuando le pregunte cual era la diferencia entre su vida de antes y la forma como viva entonces, ella me contesto:

” Desde que encontré a Dios, nunca volví a estar sola”.

En ese momento me di cuenta que esa también era mi historia, yo no había sido criada como atea, pero si,  con la amenaza de un Dios castigador;  y  creo que eso es peor.

Pero como te dije antes, la obra de Dios es perfecta y quizá,  si  mi educación no hubiera sido así, la necesidad de buscar respuestas  no se habría presentado y yo no estaría acá con este suave sentimiento de unidad, protección y compañía.

Dios es perfecto y Su obra también lo es:

“Desvincúlate de la actitud de que este mundo es maligno, está lleno de gente mala, y empieza, hoy mismo, a buscar el bien en la gente con la que te encuentres. Recuerda que, por cada acto de maldad, hay millones de actos de amabilidad. Este universo funciona con la energía de la armonía y el equilibrio. Inspira para absorber esa energía y elimina de tu mente y tu corazón la idea de que eres una víctima. Toda vinculación con tus traumas crea una toxicidad celular en tu cuerpo y un envenenamiento espiritual de tu alma”.   Wayne Dyer

 Este cuarto paso en el borrado de memorias es como llegar a la meta, he pasado por la inspiración,  que es el impulso que me insta a buscar.

 Luego viene el arrepentimiento que me da,  el haber estado ciega dando vueltas sobre lo mismo y utilizando memorias llenas de dolor.

Luego la reparación que comienza con  detener  el uso de esas memorias, entregándoselas a la Divinidad.

 Para llegar finalmente a iluminarme descubriendo que mi equilibrio está en mi sociedad con Dios, El y yo somos una estructura firme.

 Ya no hay quejas, ya no hay victimización, ya no repetiré una y otra vez la historia de las pruebas por la que he pasado, recreándolas y reafirmándolas como una posesión  tenebrosa.

«Tu biografía se convierte en tu biología»  Wayne Dyer

Confiare en el proceso de estos cuatro pasos, haciendo uso en mis tres estados de consciencia en perfecta armonía.

Con la colaboración de mi mente consciente, Madre-UHANE, tomare la decisión de entregar mis memorias para ser transmutadas, elegiré perdonar y liberar, reparar y repararme.

 De mi mente subconsciente, UHIHIPILI- niño interior, tomare esas memorias que elegí entregar.

Con mi supra consciente, AUMAKA-padre, en unión y equilibrio perfecto con Dios, entregare y recibiré de vuelta  esas memorias transmutadas en luz.

La luz que nos llega nos da claridad y con esa claridad cada día vamos reconociendo nuevas opciones y también instalando memorias de aceptación, entrega y paz.

¡Te amo, Gracias!

Divino Creador Padre, Madre, hijo, los tres unidos como solo Uno, en equilibrio perfecto. Te entrego todas mis dudas, sensación de abandono y soledad para que Tú las trasmutes en luz.

Que pueda con serenidad, aceptación  y entrega sentirte como mi morador y motivador interno

¡Y así se ha hecho!

Lo siento, por favor perdóname

Te amo

Gracias

Ana María

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”