Ho´opo Boletín de Agosto 2015

Agosto por tradición es un mes que se relaciona con la

abundancia.

Originalmente Agosto sólo tenía 29 días y el emperador César

Augusto le cambió el nombre original y le aumentó días para

que sea digno de llevar su nombre.

 

Abundancia es la esencia misma de la naturaleza. Todo lo que nos

rodea es abundante, árboles, aves, estrellas, agua, la inmensidad del

sol, etc.

 

Vibrar en armonía con la abundancia del universo es también

nuestra naturaleza original, pero vamos perdiendo esa vibración por

la utilización que hacemos de memorias equivocadas.

 

Las memorias se traducen en pensamientos y los pensamientos en

palabras que repetimos una y otra vez creando una vibración baja y

contraria a la abundancia.

El miedo, la envidia, la comparación, la victimización y la

conmiseración son energía de carencia.

 

Muchas veces sin darnos cuenta utilizamos la queja a modo de

comunicación, entre el relato fiel de nuestras dolencias y los

comentarios sobre la falta de tiempo, vamos creando un espacio

propicio para que la carencia se desarrolle.

 

Para comenzar, será en nuestro pensamiento que nos

armonizaremos con la abundancia.

Pensar de la manera correcta, nos llevará a hablar de la manera

correcta y actuar igualmente.

 

Cada “esto no es para mí”, “no tengo”, “me falta”, “no me dan, o no

me dieron” son como imanes para que la carencia permanezca

entre nosotros.

 

En cambio la gratitud y el servicio atraen a la abundancia.

 

Hay un principio en la disciplina del Aikido, que dice que al enemigo

no se le enfrenta sino que se mira en su misma dirección y se le

reorienta.

 

¿Cómo aplicar este principio con el enemigo de la carencia?

Para ver de dónde se originan nuestros pensamientos de carencia y

hacia dónde van, tenemos que mirar en la misma dirección que van

nuestros pensamientos automáticos o nuestras creencias sobre la

abundancia y luego reorientarlas de la forma correcta de tal manera

que la abundancia sea el camino por donde recorreremos el resto

de nuestra vida.

 

Abundancia es mucho más que la ausencia de carencias, tampoco

es el exceso de cosas materiales, abundancia es un estado

satisfactorio de comodidad, de aceptación y de trabajo con alegría.

 

Para quienes no les es posible venir a los talleres de sincronización

personal con la abundancia, les comparto unas simples preguntas,

para que puedan hacer el trabajo de manera particular,

reconociendo, admitiendo y corrigiendo sus pensameintos y

actitudes de carencia:

 

1-Me comparo, ¿me siento superior o inferior?

2-En el trabajo ¿tengo la sensación de estar mal remunerado mal

considerado, que trabajo más de lo que me corresponde trabajar?

¿ siempre estoy en estado de conmiseración?

3-¿Tengo deudas emocionales? ¿Las cobro o las debo?

Si las cobro, lo hago desde la victimización, con rabia y deseos de

venganza.

Si las debo, me siento culpable y avergonzado.

4- ¿Tengo miedo a perder lo que tengo?

La carencia existe primero en el pensamiento.

5- ¿Siempre estoy esperando en conseguir gratis determinados

beneficios?

Pongo mi esperanza en recibir una herencia, ¿en recibir regalos

fabulosos? ¿Divago pensando en recibir sueldos extraordinarios? ,

recibir, recibir, recibir.

Es momento de entender que no existe nada que sea gratis.

6- ¿Las palabras, no tengo, no puedo, es imposible, está difícil,

tengo deudas, gastos fijos, etc. son parte de mi vocabulario

cotidiano?

7- ¿Me cuesta dar, de mi tiempo, de mi amor o mi dinero?

8- ¿La crítica y el juzgamiento están siempre presente en mi

conversación interna?

 

Si has respondido positivamente a una o más de estas preguntas,

es momento de comenzar a corregir estas memorias que nos alejan

de la abundancia.

 

Son simples ajustes que pueden traernos resultados sorprendentes.

 

Cuando finalmente comprendamos que podemos transitar por el

camino más fácil con tan sólo hacer un pequeño esfuerzo y dirigir

nuestras memorias de una manera saludable y beneficiosa para

cada uno de nosotros y para todos y todo lo que esté en nuestra

realidad .

 

Que Agosto sea el mes en donde la Abundancia se instale

definitivamente en nuestras vidas y…

 

Que tengamos paz, más allá de todo entendimiento.

 

 

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo

Uno. Te entrego toda memoria de carencia para que Tú la

transmutes en luz.

 

Enséñame a servir y alegrarme por el bienestar de todas las

formas de vida en mi realidad.

 

¡Y así se ha hecho!

 Lo siento, por favor perdóname

 Te amo, Gracias

 Ana Maria

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”
 


INTUICIÓN

Cuando en Ho´oponopono hablamos de los tres estados de consciencia,

nos estamos refiriendo a tres tipos de vibración distinta.

 

La consciencia o La Madre-Uhane, es la que vibra de manera más

densa, más pegada al cuerpo y sus sentidos y la que ejerce el libre

albedrío haciendo una elección constante ya que está sumergida por

completo en el mundo dual. Para la consciencia siempre habrá bueno y

malo, blanco y negro, etc.

 

El subconsciente- El Niño-Unihipili, tiene una vibración mucho más

elevada y maneja toda la información tanto material cuanto emocional, es

el subconsciente el que nos crea un marco de referencia para la realidad

que vivimos, pone los límites, límites que en realidad no son reales, pero

nuestro subconsciente siempre nos hará creer que sí lo son.

 

El supraconsciente, El Padre-Aumakua, es el alma individual, es nuestro

verdadero ser, el YO SOY, y su vibración es muy alta, siempre está en

estado de serenidad y en unidad absoluta con todo lo creado, el

Supraconsciente está siempre conectado al Absoluto.

 

Cuando nuestro consciente y subconsciente se unen al Supraconsciente,

sentiremos cambiar nuestra vibración y los límites se diluyen, estamos

conectados con todo lo existente. En este nivel es que ocurre la intuición,

tocamos la realidad más alla de lo físico.

 

Pero, aún hay un paso más avanzado , cuando el Supraconsciente se une

a la Fuente, a lo Absoluto, entonces llegaremos a la iluminación, en este

estado ya nada nos es ajeno.

Esto no quiere decir que cada estado esté limitado detrás de muros

infranqueables, no, todo lo contrario, nos movemos ondulantemente

dentro de los tres estados de consciencia durante todo el día.

 

Claro que si nuestras actividades son totalmente mundanas y frívolas,

nuestros momentos de alta vibración serán menos frecuentes.

 

Mientras más apegos materiales y más densos sean éstos, estaremos

mucho más tiempo ubicados tan sólo en la consciencia, ejerciendo un

libre albedrío muy limitado ya que estaremos influenciados por el

entorno.

 

Todos los seres humanos tenemos intuición y momentos de iluminación,

la diferencia está en la frecuencia en que ellos suceden.

 

A mayor contacto con el Yo Soy, mayor intuición , y la iluminación llega

con mayor frecuencia cuando nos mantenemos en ese contacto.

 

La iluminación es siempre nueva, fresca, viene directo de la fuente, la

diferencia con las memorias es que las memorias son muy gastadas, han

sido usadas innumerables veces, cuando una iluminación se pone en

práctica o se materializa, se convierte en una memoria positiva sí, pero

memoria al fin y al cabo.

 

Cuando practicamos el Ho´oponopono, nos mantenemos limpiando

memorias constantemente, es por eso que al comenzar a repetir “Te

amo, gracias” una y otra vez de pronto nos sentimos más ligeros y más

conectados.

 

Los primeros conocimientos sobre el Ho´oponopono, nos abren y señalan

el camino, cuando comenzamos a trabajar de manera más precisa con

nuestro Niño Interior, descubrimos que hay un sinfín de posibilidades, eso

nos lleva a sincronizarnos con la abundancia de la creación y recuperar

nuestro verdadero estado.

 

La intuición muchas veces nos señala o advierte el camino, y aprender a

reconocerla es importante, en cambio la iluminación nos da una

comprensión total, mientras que con la intuición aún nos mantenemos en

el camino de la dualidad, entre “esto o aquello”, con la iluminación

entramos en la unidad en donde nada nos es ajeno.

 

Llegar a la iluminación, es un camino largo y fascinante, es el propósito

de nuestra vida, ¡saber quiénes somos!.

 

Para eso es necesario dejar, confiar y aceptar.

 

Los grandes maestros han sido seres iluminados que fueron

perseverantes en su búsqueda y se dejaron guiar, confiaron y

aceptaron su destino e identidad Divina.

 

Lo maravilloso es que con una heramienta de simple uso como lo es el

Ho´oponopono, podemos llegar a niveles que en la antigüedad sólo fueron

reservados para los sabios y yoguis que hacían grandes austeridades

hasta alcanzar la iluminación.

.

Seguiré limpiando memorias, a cada momento en cada situación,

dejándome llevar por mi intuición hasta alcanzar la iluminación.

 

Que tengamos paz, más alla de todo entendimiento.

 

 

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno.

Te entrego todos mi bloqueos y apegos para que Tú, los transmutes

en luz.

Abre mi intelecto y mi subconsciente para que puedan escuchar tu

voz.

 

¡Y así se ha hecho!

 Lo siento, por favor perdóname

 Te amo, Gracias

 Ana Maria

 
Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”
 


 

Abundancia, Dinero y Prosperidad


“La abundancia no es algo que adquirimos, es algo con lo que nos conectamos.” – Wayne Dyer

 

Cuando me pides que escriba sobre la abundancia, mis memorias se confrontan, tengo aún mucho por trabajar y enderezar en ese campo.

Puedo compartir  contigo,  lo que he encontrado sobre este tema, que es sobre lo que estoy trabajando, y así lo trabajamos juntos.

Abundancia es mucho mas que dinero, es una actitud ante la vida, la abundancia comienza con el DAR.

“Uno puede descubrir siempre  algo más para dar, porque  el amor se multiplica, no tiene fin. No es posible encontrar un receptáculo lo suficientemente grande, una vez que el amor comienza a fluir” SSB

Para vivir en abundancia primero hay que bendecir la abundancia, todo lo que veo  en la naturaleza es abundante, solo tengo que ver a mi alrededor.

 También es importante bendecir la abundancia en otros, ¿cuántas veces escuche:  que el dinero es sucio y los ricos ladrones? Habré borrado ya,  esa creencia?

La escasez de dinero puede tener sus raíces profundas en pensamientos, sentimientos y memorias subconscientes del pasado, o estar influenciada por viejos conflictos no resueltos, con personas de mi familia o de mi entorno social y laboral.

 

Las situaciones de escasez económica que se me presentan en ocasiones, pueden obedecer a muy diversas causas, todas ellas susceptibles de ser limpiadas y borradas con un:

“!Te amo, Gracias!”


La divina providencia tal como su nombre indica es la encargada de la provisión adecuada de todo lo que necesito en la vida material, siempre y cuando, no sea yo misma, con mis memorias pasadas de escasez y no merecimiento, quien corte el natural fluir de la abundancia que por ley divina me corresponde.

 

Es la fuerza de vibración de mis pensamientos, palabras y acciones, en armonía y coherencia, la que día a día va manifestando, el nivel de riqueza material y personal del que puedo disfrutar en la vida.

 

Si te concentras en lo que no tienes, nunca, nunca tendrás suficiente. (Oprah Winfrey)

 

¿Acaso no es energía todo lo que me rodea? Si bloqueo el flujo de energía del dinero, ¿no estoy bloqueando la abundancia y propiciando la miseria?

 

Porque el dinero no es más que energía y como tal responde a las leyes universales del intercambio energético. Apreciarlo, respetarlo y entregarlo con amor es lo que lo mantiene en permanente circulación. El equilibrio entre dar y recibir es la clave, dar, aún en las situaciones más precarias, mantendrá el dinero fluyendo en mi  vida.

Si quiero tener una economía saneada hare bien en estar atenta a lo que pienso sobre el dinero, lo que expreso en relación con él y con qué criterios lo gasto o lo invierto. No temo a que se acabe,  no pago las cuentas a medias,  a mis  empleados a medias,  no regateo,  no me lamento a la hora de pagar una cuenta y mas bien bendigo  a quien lo recibe.

 

 Otro tema muy importante es cómo valoro mi trabajo, cómo administro lo que me fue dado: Si recibo un don y lo comparto gratuitamente ocurren dos cosas:
 Le niego el valor que tiene. Y estoy siendo desagradecida con lo que el Universo me da.


Impido que los demás ( yo soy una parte de ”los demás”) aprecien lo valioso que es. Y cuando alguien no puede percibir el valor de algo, no puede recibir su beneficio.

  “Lo que estamos esperando – la paz de la mente, la alegría, la gracia, la conciencia interior de la abundancia simple – sin duda vendrá a nosotros, pero sólo cuando estemos listos para recibirlo con un corazón abierto y agradecido”. (Sarah Ban Breathnach)

 

 

Si me estoy quejando todo el tiempo diciendo que el mundo está muy mal, que no hay trabajo, que no llegare a final de mes, y que no tengo dinero.  ¡Que no me  extrañe que éste, no quiera quedarse en mis manos y se vaya rápidamente en el mismo instante en que aterriza en ellas!.

 

Trato de estar muy atenta a los pensamientos de escasez, a las emociones de miedo a la pobreza y a las expresiones de limitación, para limpiarlos y borrarlos constantemente.

En el caso de estar en medio de una conversación en la que escucho declaraciones de carencia y escasez, o ante las noticias que me hacen sentir con miedo al futuro, mentalmente afirmo:

La divinidad en mi vida es abundancia y la entrega para ti y para mí , Te amo, Gracias.

 

         También repito cada día esta oración:

 

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como uno solo, te entrego todas las falsas memorias, los pensamientos y las creencias, los sentimientos y emociones que ocasionan en mí: carencia, precariedad económica, escasez y limitación de cualquier índole, miedo al futuro, depresión o tristeza.

 

Para que sean borradas de mí, desde la raíz y por siempre.

Y a cambio: sé, que recibiré Tu luz.

 

Lo siento, perdóname, te amo, gracias.

Que la energía de la abundancia nos envuelva y que  el dar sea como el pan de cada día para nosotros.

Llovizna

Llovizna

Llovizna

Te Amo, Gracias

Ana María

LPDY