Memorias y memorias

La descripción que se da sobre lo que es  la memoria es la siguiente:

La memoria es una función del cerebro y, a la vez, un fenómeno de la mente que permite al organismo codificar, almacenar y recuperar la información del pasado.

Podría decir que esta descripción es incompleta, ya que la memoria es más, mucho más, que eso.

Según el Ho´oponopono la memoria es la responsable de la realidad que vivimos.

Solo re-conocemos a través de nuestras memorias, es más,  aquello que no está almacenado en ella,  no puede ser re-conocido.

Tu y yo, hacemos uso de la memoria veinticuatro horas al día, siete días a la semana, si no fuera así, todas nuestras funciones se detendrían, funciones vitales como la respiración, circulación etc.

 Quizá, nunca antes,  nos habíamos detenido a pensar cuan importante es la memoria, nuestra vida material depende de ella.

El pensamiento es un proceso mental, sin embargo depende de la memoria, ya que,  sólo podemos pensar en aquello que conocemos, el dialogo constante,  con el que hablamos con nosotros mismos,  esta basado en nuestras memorias.

Cada acto, cada pensamiento, cada sentimiento está sustentado por una memoria.

Siempre trato de estar alerta, ya que lo que pienso es lo que siento.

Si en este momento, pienso en una experiencia agradable, mi sensación será placentera, por el contrario si pienso en algo doloroso, mi sentimiento será de dolor.

Muchas veces nos confundimos, y en la búsqueda de la sensación, quedamos atrapados en pensamientos atormentadores que nos traen sensaciones extremas, pero negativas.

Tal es la caso del  miedo, la culpa, el odio, la envida, la venganza,  todas estas sensaciones están generadas por pensamientos que a su vez se basan en memorias almacenadas desde tiempos ancestrales.

Las memorias son innumerables y no siempre están activas, por eso pensamos que no las tenemos y lo que sucede es que están latentes o en baja actividad.

Cuando las memorias que tenemos activas son negativas, nuestra realidad también lo es.

 También es cierto que tenemos maravillosas memorias positivas que son las que nos llevan a  buscar respuestas a las interrogantes ¿quién soy yo?, ¿de donde vengo?, ¿a dónde voy?.

Las respuestas las iremos encontrando en la medida que sigamos limpiando.

Mi supraconsciente,  es  lo que yo soy verdaderamente, una expresión divina.

 Para entender algo, que está más allá de mi pequeña mente material, podría, explicármelo  con  un ejemplo sencillo:

 “Si Dios fuera el mar, cada uno de nosotros seriamos,  una gota del mar, con las mismas características pero limitados a una gota, la misma que está destinada a fundirse en el mar”.

Cada uno de nosotros somos seres divinamente perfectos, limitados a un alma individual que esta destinada a fundirse en el alma universal.

Utilizamos el vehículo del que hemos sido dotados, y  que es este cuerpo,  con su consciente y subconsciente.

Entonces, esa energía divina que somos,  esta limitada a expresarse a través del cuerpo y la confusión  de creer que somos el cuerpo,  es lo que nos trae sufrimiento, porque las memorias pertenecen al vehículo y no al conductor del vehículo.

El ego,  es creer que somos el vehículo, y no darnos cuenta que, en realidad ¡somos el conductor del vehículo!,

Ihalakala Hew Len dice,  que nosotros  hemos sido creados solo para limpiar, y,  esa limpieza de memorias negativas,  deja  que la brillantez del alma reluzca cada vez más.

Las enfermedades son memorias que se activan, ¿qué las activa? No podemos saberlo con exactitud.

Lo que si,  es cierto,  es que las memorias negativas como la rabia, el resentimiento, la culpa, la amargura, los celos, etc., activan todos los procesos físicos negativos.

 

Hacer uso del Ho´oponopono para limpiar memorias es la forma mas sencilla que existe,  y funciona sin tener que ponerle ningún tipo de carga emocional, es SOLO LA PALABRA.

No te confundas tratando de ponerle emoción al “Me perdono” o al “Te amo, gracias”, porque las emociones que conocemos,  vienen de nuestras memorias que están impregnadas de apego.

Cuando digo  “Me perdono” o “Te amo. Gracias”, lo digo sin emoción, ya que la energía purificadora de la palabra, traerá el perdón y el amor verdadero,  desde la misma fuente universal .

Otra memoria maravillosa,  que podemos activar y  mantener activa constantemente, es : La gratitud.

Cuando agradezco: no me quejo, no juzgo, no envidio, no critico: Solo agradezco por todo y todos.

¡GRACIAS!

“La gratitud es el espacio sagrado en donde aceptas que existe una fuerza aun mayor que tu ego, y ella  esta siempre trabajando y es siempre disponible”

Wayne Dyer

 Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Te entrego todas mis memorias negativas, esas que el día de hoy puedan quitarme la paz, para que tu las transmutes en luz.

 ¡Y así se ha hecho!


Lo siento, por favor  perdóname


Te amo,
Gracias


Ana María

 


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”