Si, pero…

¿Que me detiene? ¿Qué impide mi avance? ¿Cuantos “peros” tengo a la mano para justificarme?

 Yo podría trabajar, “pero” a mi marido no le gusta,… me encantaría estudiar, “pero” como hago mis hijos,… a mi no me gusta renegar, “pero” mi marido me saca de quicio,… yo no quiero deprimirme, “pero” es que he tenido una vida muy difícil….

 ¿Te suena conocido?

 Dejemos partir a nuestro PERO particular, ese famoso PERO es el mejor escudo para esconder nuestro lado oscuro.

 Que todos tenemos un lado oscuro es cierto, pero como alguna vez escuche decir a mi maestro: Para que la oscuridad se vaya, hay que iluminarla.

 Que quiere decir esto, que si no nos observamos y no encontramos detrás de que “PERO” escondemos nuestras memorias negativas, no podremos llegar a superarlas.

 Esas memorias que se activan una y otra vez, deteniendo el avance,  en mi meta de encontrar una paz estable en mi vida.

 Hace un tiempo te hablaba sobre tener un buen discernimiento, el significado de discernimiento es: Juicio por medio del cual percibimos y declaramos la diferencia que existe entre varias cosas.

 Es decir,  tener claridad, y esa claridad es necesaria para ver,  cuántas justificaciones utilizamos para esconder nuestros temores y aversiones.

 La practica del Ho´oponopono nos trae claridad, por cada memoria negativa que entregamos, recibimos la luz de su transmutación.

 Cuando vemos nuestra limitaciones es como iluminar un cuarto oscuro, solo así,  podremos ver que cosa esta fuera de su sitio.

 La pereza es una característica difícil de detectar, y  cuando hacemos uso de los “peros” en nuestras vidas, muchas veces lo hacemos por pereza.

 Es mas fácil, dejar la responsabilidad y cargársela a otra persona.

 Siempre detrás de un “pero” , hay victimización.

 Cuando aceptamos, que sea lo que sea que estamos experimentando, es gracias a que,  una memoria en nosotros está re-creando lo que ya conoce.

 Entonces podremos ver que nos escondemos detrás de una excusa.

 Esas excusas que me detienen, que me dan la justificación para dejar de aceptar y entregar.

 Si esperamos que el impulso para tomar acción sobre algún hecho de nuestra vida,  venga desde un impulso “natural”, tal vez ese impulso no llegue nunca.

Es necesario que el impulso lo generemos desde nuestro libre albedrio.

 No tengo ganas de ir a trabajar, pero lo hago con mis pies, no con mi cabeza.

Eso quiere decir que elijo levantarme y hacer mi trabajo, porque si espero querer hacerlo, puede que mis memorias de pereza nunca me lo permitan.

 Siempre recuerdo, que cuando comencé en este camino, fue necesario dejar atrás muchas de las costumbres “aceptadas”,  pero toxicas que habían en mi vida. Mi esposo y mis hijos, también estuvieron dispuestos al cambio.

 Pero no fue así,  con el resto de los familiares y amigos. Algo de lo que estábamos cambiando,  les generaba incomodidad.

 Fue en ese momento,  que la persona que me guiaba me dijo:” cuando una rana decide dejar el estanque y correr hacia el mar, el resto de ranas se alborotan y tratan de jalarla”

 Este consejo mi sirvió para dejar de escudarme en los peros, y seguir adelante.

 Entender que el cambio de una persona del grupo, hace también un cambio en todo el grupo y  que los cambios pueden despertar temor, es discernimiento, pero no detenimiento.

 Ir limpiando memorias negativas trae cambios en la vida, y al cambiar y mejorar en nosotros, también lo hace con todo y todos los demás.

 Si volvemos a la historia de las ranas, cuando la rana decide salir del estanque, estará abriendo un camino que,  las demás ranas si así lo desean  podrán recorrer.

 Las barreras que nos detienen, siempre vienen de nosotros mismos, las excusas las inventamos nosotros. Las barreras son mentales.

 Lo que más nos cuesta perder son nuestras ideas, sin embargo estar dispuesta a perder mis ideas limitantes fue  lo mejor que pude hacer en mi vida.

 Avancemos hacia el mar, dejando el pequeño estanque, avancemos hacia el estado de paz y dejemos atrás el estanque de la angustia y el desasosiego.

 Deseo que tengamos paz más allá de toda comprensión.

 

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como solo Uno. Te entrego todas las justificaciones que utilizo como barreras en mi vida, para que tu las transmutes en luz

Ayúdame a verlas, superarlas y estar dispuesta a perderlas.

 ¡Y así se ha hecho!


Lo siento, por favor  perdóname


Te amo,
 Gracias


Ana María


Aloha  Ke Akua



“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”