PISTIS

Pistis es la palabra original griega para definir a la certeza, la confianza y

finalmente la fe.

 En la mitología griega, Pistis era la personificación de la confianza y

fiabilidad.

 ¿Por qué la definición va en ese orden?, certeza, confianza y fe. Comienza con algo que puede ser intelectual, tener la certeza de algo, eso genera confianza que ya es emocional, y finalmente se recibe el don: la fe.

 Muchas veces hablamos de tener fe, pero sabemos que es algo que sólo nos es conferido como un don.

En cambio es una elección propia, tener la certeza y confianza.

 Así como la duda es una energía de muy baja vibración, que atrae más de lo mismo, la confianza es todo lo contrario, vibra muy alto y de alguna manera nos coloca en una situación privilegiada para la aceptación.

 Cuando confiamos en la perfección del universo, éste se nos muestra en su mejor expresión.

 Según estudios realizados por algunos expertos, en la antigüedad nunca se utilizó la palabra “Fe” , en griego la palabra utilizada siempre fue “Pistis” como sinónimo de confianza.

 El niño que duerme plácidamente en brazos de su madre, está en total confianza y la madre se encargará de proteger a su niño aún con su propia vida.

 Tú y yo somos niños descansando en brazos del Creador, si estamos confiados Él, se encargará de protegernos.

Tener la certeza de que siempre somos escuchados y que se nos dará lo que es mejor para cada uno de nosotros en el momento correcto, a veces nos cuesta.

 Siempre pedimos lo que creemos que es lo que realmente necesitamos, pero nuestra mente es limitada y ese “pedido” también lo es.

 Cuando entregamos confiados, dejamos abiertas las posibilidades infinitas del universo, y en esa infinidad seremos sorprendidos.

 Estamos pasando por momentos de cambio, eso implica dejar atrás lo conocido y muchas veces esa situación nos genera temor.

 Es en este momento que tendremos que poner en práctica la confianza, nuestro aporte a cada situación es en primer lugar, tener una buena actitud y hacer lo que sea que hagamos con rectitud.

 Diciembre es un mes con mucha presión social y eso puede traer estrés. Una buena forma de ubicarnos en proporción es tratar de vivir el presente.

Preguntarme: ¿acá y ahora, qué necesito realmente?

 Una buena manera de soltar el estrés es solucionar hoy día lo de hoy, no vivir adelantado calculando lo que pasará de aquí a tres meses, o un año.

 El hoy es el único momento real y ese momento hay que vivirlo con confianza.

 Muchas veces el temor a la enfermedad o a la muerte no nos deja disfrutar la vida. Es más, podríamos aprender a ver la muerte como un nacimiento más, así como llegamos a este plano procedentes del plano espiritual, naceremos nuevamente a otra forma de vida.

 Pero lo verdadero es que estamos acá y ahora y podemos disfrutar de la presencia en este plano de nuestros seres queridos, y a su vez, ellos de nosotros.

 Los antiguos hawaianos que siguieron los siete principios Huna, los aplicaron siempre al presente y utilizaron la certeza, la confianza y la fe.

 El primer principio es Ike, “La percepción”: “El mundo es lo que tú piensas que es”.

 El segundo principio es Kala, “La unidad”: No existen limites, la separación es sólo una ilusión”.

 El tercer principio es Makia, “La focalización”: Allí donde va tu atención, va tu energía”.

 El cuarto principio es Manawa, que significa “La Persistencia”: y es interpretada como “Ahora es el momento del poder: El presente”.

 El quinto principio es Aloha, “El Amor”: Para ellos “Amor es estar felíz”.

 El sexto principio es Mana, que es “La fe”: dice: “Todo poder viene de tu interior”.

 Finalmente el sexto principio es Pono, “La flexibilidad” y dice: “ Con la eficacia es como se mide la verdad”.

 Cada principio es un tesoro y una fuente de refelexión.

 A mí me gustaría interpretarlo así: el mundo será lo que yo crea que es, nada me es ajeno, por lo tanto en mí, está todo, si mi atención va a lo negativo, eso es lo que fortaleceré en mi vida, el único momento verdadero es el hoy, El amor verdadero sólo trae felicidad, y sólo puedo ser felíz hoy, de mi depende elegir vivir en amor o en crítica, y si decido ser felíz, lo seré hoy y seré flexible, perdonando y reparando mis errores.

 ¿Y a tí, cómo te gustaría vivir estos principios?

 Comencemos por elegir la confianza como punto de partida, y…

 Que tengamos paz, más allá de todo entendimiento.

 

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como sólo Uno. Te entrego todas mis memorias de duda, temor y anticipación para que Tú, las transmutes en luz.

 Enséñame a vivir confiada en el presente, agradecida por el pasado y sabiendo que cuando el futuro llegue, será un presente más.

 
¡Y así se ha hecho!
 

 Lo siento, por favor perdóname
 


 Te amo,  Gracias

  
Ana Maria
 

 Aloha  Ke Akua




“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”
 


LA DUDA

 

“La duda es desperdicio de energía, el que duda es como si invitara a

otro a vivir en su cabeza, tiene dos pensamientos que orientan hacia dos

polos distintos, contrapuestos. En esa lucha el ser se agota…”

                 Graciela Busto en su Libro “Sai Baba el Señor”.

 

Es imposible detener nuestro pensamiento, pero sí es posible elegir en qué

pensar, esa decisión es algo que se hace con el intelecto y es la mejor

disciplina que podemos tener.

 

Lo que pienso es lo que siento, es así de simple y efectivo.

 

¿Para qué entonces, atormentarme con pensamientos catastróficos, carentes o

llenos de rencor?

 

Mis pensamientos pueden ser purificados una y otra vez. En un principio de

forma mecánica, forzándome a modificarlos, luego cuando lo haya convertido

en un hábito simplemente sucederá sin tanto esfuerzo.

 

Sólo podremos comprobar esta verdad poniéndola en práctica, sino quedará

en una simple teoría.

 

Cada vez que nos llenamos de aquellos “ ¿Y si…?”, lo único que hacemos es

sembrar la duda en el camino y eso no nos dejará avanzar.

 

Esos “¿Y si?” son posibilidades que nos planteamos fruto de nuestra

inseguridad y que generalmente nunca llegan a suceder, pero sí nos detienen

y nos alejan de la fe.

 

Hace algunos años alguien me contó esta historia:

 

“Se anunció una exposición de las armas más letales, los potenciales

clientes eran acompañados por un guía, quien explicaba la eficacia de

cada una de las armas allí expuestas, en los salones se exhibían todo tipo

de armamento a cual más sofisticado… pero al final de toda la exposición

había una habitación prácticamente vacía que sólo tenía en el suelo un

pequeño trozo de madera vieja.

Cuando los interesados en el armamento llegaron a esa habitación

preguntaron de qué se trataba, y el guía les explicó: Ese pequeño trozo de

madera representa al arma más destructiva que existe: ¡La duda!”

 

No dejemos que la duda nos paralice, esa es una energía de vibración muy

densa y destructiva, en todos los aspectos de nuestra vida: en el familiar,

sentimental y laboral.

 

Muchas veces cuando hacemos los talleres, los asistentenes dudan de la

efectividad del Ho´oponopono, por su simpleza.

 

Y eso es porque tenemos creencias muy arraigadas, las creencias son

memorias que se activan ya sea culturalmente o familiarmente, todos creemos

por ejemplo que, “lo bueno cuesta”, por eso dudamos cuando se nos

presentan soluciones simples.

 

Cuando recibimos inspiraciones, -o sea- ideas nuevas que vienen desde nuestro

verdadero ser, que se ha conectado al alma universal, esas inspiraciones

siempre nos llenan de paz.

 

No hay inspiración que te lleve al temor, porque de la divinidad sólo se recibe la

vibración creadora del amor.

 

En cambio el miedo se podría describir como la ausencia de amor.

 

Entonces los temores son fruto de nuestras memorias negativas activadas una

y otra vez.

 

¿Cómo las limpiamos? Repitiendo “Te amo, gracias”, de esa forma vamos

instalando nuevamente nuestras memorias de amor con toda la luz que traen

consigo.

 

También es importante no confundir la duda con la cautela, son dos cosas

diferentes, se duda por inseguridad, se es cauteloso por responsabilidad.

 

Los actos impulsivos pueden conducirnos a cometer errores.

 

Toda disciplina de vida, toda disciplina espiritual, debe ir siempre

acompañada de un buen discernimiento, de lo contrario entraríamos en el

terreno del fanatismo.

 

Entonces podríamos llegar a esta conclusión: Tenemos la certeza absoluta que

Dios, La Divinidad, El Absoluto, o como sea que tu quieras llamar a ese poder

que mantiene al universo funcionando, siempre nos escucha y siempre está allí

para darnos Su apoyo.

 

El error, si es que existe, está en nosotros que no estamos listos, abiertos y

confiados a recibir ese apoyo.

 

“Pistis” es la palabra griega para describir a la certeza absoluta, es una certeza

totalmente intelectual, no emocional.

 

Y esa certeza no puede convivir con la duda.

 

Entrenemos nuestro intelecto para pensar lo correcto y lo constructivo,

observemos nuestras palabras, ya que es con nuestro lenguaje que revelamos

nuestras verdaderas creencias, y es con ese mismo lenguaje que podemos

sembrar de dudas nuestro camino.

 

Que tengamos paz, más allá de todo entendimiento.

 

 

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como sólo Uno. Te

entrego todas mis memorias de temor, duda, suspicacia y desconfianza,

para que Tú, las transmutes en luz.

 

Enséñame a creer, confiar y relajarme en Tu amor.

 


¡Y así se ha hecho!
 

 
Lo siento, por favor perdóname
 


 Te amo,  Gracias

  
Ana Maria
 

Aloha  Ke Akua




“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”