DESEOS

“Más feliz no es quien tiene más, sino quien necesita menos”

Una de las enseñanzas más frecuentes de mi Maestro Sathya Sai Baba, es poner límite a los deseos.

El enseña una y otra vez que hay que disminuir los deseos, como dice El: “Viajar ligeros de equipaje”.

Sin embargo, mi trabajo con poner techo a mis deseos va lento, muy lento, pero no me doy por vencida.

Tengo 65 años y TODO me gusta, disfruto de lo más simple como de lo exuberante y llamativo.

Me encanta la vida, me encanta vivir, y se que tengo demasiados apegos y en ello estoy trabajando.

En los años que viajaba a la India, me costaba mucho decir “NO LO NECESITO”, cada vez que veía cosas bellísimas y baratísimas, inmediatamente tenia el impulso de comprarlas: “¡Como iba a perder algo tan bello y barato!”

Pude abstenerme muchas veces, sin embargo, no lo suficiente.

A estas alturas de mi vida y gracias a la Gracia Divina, estoy completamente abastecida, entonces mis deseos ya no son para tener yo, sino para dar a los demás. Igual son deseos y es necesario ponerles un límite.

El apego, responde siempre a algún tipo de vacío. Y el vacío del cual padecemos los seres humanos es el vacío de nuestra pobre comunicación con nuestro verdadero Yo y por consiguiente con Dios.

Sai Baba nos dice…

El alimento es la medicina para la enfermedad del hambre; el agua lo es para la sed; para la enfermedad del Ciclo de Nacimiento- Muerte, DIOS es la medicina, para la enfermedad del deseo, la sabiduría es el recurso especial. Para la enfermedad de la duda, desesperación y vacilación, que son las enfermedades profesionales de los aspirantes espirituales, el remedio más efectivo es hacer el bien a otros. Para la gran infección de ansiedad y agitación, el curso de acción es repetir o cantar el nombre de Dios…”

Es una buena receta siempre buscar a Dios en nuestro interior y hacer bien a los demás, que es lo que más paz aporta a nuestra vida. Por eso,  nada mejor que nuestra constante repetición del “Te amo, Gracias”.

En el último taller, un participante me comentaba que sus amigos le decían que como creía que algo tan simple como decir “Te amo, Gracias” , podía tener tanto poder.

“No es nada sencillo entender lo simple”. (Eric Hoffer)

Y eso es algo que he escuchado muchas veces a través de todos estos años que llevo compartiendo los talleres. Es increíble como creemos en todo lo que nos dicen en la televisión o en las redes sociales ¡No dudamos!

Pero sí lo hacemos para repetir “Te amo gracias”.

“Las cosas simples son las más extraordinarias y sólo los sabios consiguen verlas”. (Paulo Coelho)

Yo creo. Y por eso seguiré trabajando con mis apegos y repitiendo “Te amo gracias” para que la fuerza de la palabra vaya llenando ese vacío que hace que no pueda poner límite o techo a mis deseos.

“Te amo, Gracias”

Que tengamos paz, más allá de todo entendimiento

Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como sólo UNO. Te entrego mis apegos para que Tú los transmutes en luz.

Enséñame a poner techo a mis deseos y permíteme desapegarme cada vez más

¡Y así se ha hecho!



Lo siento, por favor perdóname



Te Amo
Gracias
 

Aloha  Ke Akua

“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”

Add a Facebook Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Anti-Spam Quiz: