UNA PRUEBA

 Yo llegué a este plano de existencia en 1953, pero mi verdadero nacimiento

sucedió el Martes 12 de Mayo de 1992.

 Tenía ya seis años de haber iniciado mi preparación como terapeuta y tres

años ejerciendo, pero mi vida estaba llena de resentimiento.

 Me había quedado en la etapa en la que creía, que todos tenían la culpa de mi

dolor.

 Las pruebas que viví fueron muy duras, quizás en una escala del uno al diez

fueron la número nueve.

Entonces me sentía con todo el derecho de juzgar y acompañaba a las

personas que venían a mí, en busca de orientación, con los mismos

argumentos: “que injustos han sido contigo”, “tienes todo el derecho de

reclamar”, “no tuviste la atención que merecías”, etc, etc.

 

De pronto un día me enteré, que había llegado a Lima, una señora que

enseñaba las terapias florales del Dr. Bach y fui a verla.

 

En su oficina tenía una pequeña ánfora de cristal llena de algo parecido a la

ceniza y yo no podía prestar atención mientras ella hablaba, porque este

pequeño objeto me tenía totalmente intrigada. Entonces hice la pregunta: ¿Qué

es eso que tienes allí?, ella contestó es “vibutthy”, ¿qué, qué es eso?… es la

ceniza que sale de las manos de Sai Baba… ¿Y quién es Sai Baba?… si te

interesa te puedo prestar un libro que habla sobre él, me dijo…

 

Llegué a mi casa y comencé a leer el libro y no podía parar de llorar. Todos mis

argumentos de rencor se iban desintegrando frente a un mensaje totalmente

liberador!!

 

En ese entonces estaba apartada de la religión católica, no quería un Dios que

permitía tantos sufrimientos.

Pero Sai Baba, hablaba de amor, de unidad, de creer y entregar, también

causa y efecto: Karma, pero no como algo de lo que no se puede escapar, sino

más bien algo que podemos purificar entregándonos a Dios.

 

Lo más importante, para él, es que Dios estaba en mí y en todos y me decía si

perteneces a una religión, esa es la verdadera, porque sea cual fuese el nombre que

le des a Dios, es siempre el mismo, y si eres católica, sé la mejor católica y si

eres judía sé la mejor judía… y si no tienes religión sólo ama y estarás en el

camino correcto!!

 

A partir de ese día traté de hacer todo lo que él indicaba, mi sed de

aprendizaje era insaciable, y comenzaron a llegar a mí todas las

enseñanzas, fueron catorce años de lectura ininterrumpida, llegaron a mí

uno a uno los pasos a seguir y en el interín comencé a viajar a la India, a la

casa del Maestro a nutrir mi espíritu , y seguí Sus enseñanzas, y me esforcé al

máximo, pero no conseguía algo que era fundamental: La entrega.

 

Yo decía haber entregado pero en realidad siempre me mantenía en control

¡Tratando de controlar a Dios! ¡Que ilusa!!

La última vez que estuve en la India fue el 2009, fue mi viaje número once, y

no había avanzado mucho en mi entrega.

 

Para ese entonces, ya sabía del Ho´oponopono desde el año 2007 pero no lo

había entendido verdaderamente, y no es sino hasta el 2011, en que leí el libro

“Cero límites” de Joe Vitale, cuando entendí que esa era la herramienta de

la entrega. Simple, bastante simple! pero muy efectiva!!

 

Y decidí hacer la prueba, entregarlo todo con un simple “Te amo, Gracias”, no

juzgar, no criticar sólo entregar.

 

Todo lo que había aprendido en los años anteriores tomaba fuerza, se

materializaba, cada vez tenía más y más paz, cada día mi entrega era más

profunda y de pronto me encontré agradeciendo por todo, sin resistencia,

aceptando, una y otra vez y con la convicción de “que se haga Tú voluntad y no

la mía”.

 

Todo se hizo más fácil, deje de ser hacedora para convertirme en instrumento.

Dios a través mio en todo, hasta en los detalles más mundanos, o

insignificantes.

“ Dios mio eres Tú a través mio”.

Nunca más volví a sentirme víctima, ni abandonada, ni alejada… no te puedo

negar que he tenido y tengo momentos difíciles, pero cuando se vive en paz y

sin resistencia, ya no lastiman.

 

¿Quieres sentirte asi?, intenta hacer esa prueba, deja de controlar y entrega, y

verás que a cada entrega siempre hay una respuesta, siempre somos

escuchados, Dios no está sólo en el cielo, está tan cerca como tu propio

aliento, está en ti y en el hombre que se sentó a tu costado en el metro, está

en ti y en cada uno de tus empleados, está en ti y en la vendedora del

mercado, en ti y aquella persona a la que quieres, y en la que no quieres tambien, está en ti y en tu pareja, en tus hijos y en todo.

 

Y todo lo que vemos en cada uno de ellos no es otra cosa que el reflejo de

nuestro propio ser, empañado muchas veces por las memorias que aún no

hemos limpiado.

 

Agradezco aquel bendito día en que una pequeña ánfora llamó mi atención, fue

el inicio a esta vida de entrega y lucidez.

 He seguido recibiendo información y enseñanzas que se fortalecen unas a

otras.

 Las formas de llegar son muchas, el camino es sólo uno: La entrega y el

constante “que se haga Tú voluntad y no la mia”.

 

¿Te animas a hacer la prueba?

Que tengamos paz, más allá de todo entendimiento.

 

 Divino Creador, Padre, Madre, Hijo, los tres unidos como sólo Uno. Te

entrego cada pensamiento, palabra y acto de mi vida para que Tú, lo

transmutes en luz.

 Enséñame a entregártelo todo y transfórmame de “hacedora” en

“instrumento”.

 
Lo siento, por favor perdóname
 


 Te amo,  Gracias

  
Ana Maria
 

 Aloha  Ke Akua




“Dios está dentro”, “Dios es Amor” “Dios Es YO SOY”
 

Add a Facebook Comment

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Anti-Spam Quiz: